Uno de los mayores temores en nuestras vidas, es que todo aquello por lo que hemos luchado, trabajado,…y que finalmente, hemos logrado con esfuerzo y sacrificio, pueda perderse, o simple, y desgraciadamente, nos pueda ser robado.
Para evitar estas situaciones de intranquilidad, y poder disfrutar de mi día a día sin temor a que esto suceda, normalmente, y previamente a que estos hechos pudiesen darse, la gran mayoría suele planificar y gestionar la contratación de algún producto y/o servicio, para que garantice, que eso no pueda suceder, o bien, que si se diese el caso, pudiese ser repuesto o compensado.
Este producto o servicio contratado va ligado a un coste, el cual, es siempre Bienvenido, por el mero hecho, que ayuda a poder vivir y disfrutar de la vida con la tranquilidad suficiente, de no tener que sufrir por una situación frustrante, de las anteriormente comentadas.
Éste hecho, es tan común, y tan habitual, como a su vez, también lo son las medidas necesarias que se toman para asegurarlos.
Por el contrario, y sorprendentemente, en cuanto tratamos del mismo modo, a nuestros Ahorros, no se dan aspectos que si se daban anteriormente, como sería el de planificación, prevención, gestión y asunción de costes por los mismos.
Por esta razón, y al igual que sucede cuando, sin que seamos conscientes, nos entran a robar en nuestras dependencias y se nos llevan objetos de valor, con nuestros ahorros ocurre algo similar, provocado por lo que, humildemente, defino como “EL LADRÓN SILENCIOSO”, o lo que viene a ser lo mismo, la INFLACIÓN.
Pero antes de entrar a razonar del porqué de este apodo, es muy necesario conocer qué es la inflación. Y entre centenares de maneras de definirla, podríamos escoger la más sencilla, como que es la elevación del nivel general de precios, la cual se mide a partir de un nivel de precios, que generalmente es el índice de precios al consumo (eliminando sus elementos más volátiles como alimentos frescos, bienes y servicios energéticos)
Por ello, y ahora que conocemos lo que es, podríamos relacionar a ésta, con la idea inicial, sobre el temor a perder nuestros Ahorros.
Y sí, sorprendentemente, debido a la importancia de los mismos, para éstos, no somos ni tan precavidos, ni lo planificamos de la misma manera, para así, poder vivir de manera más tranquila, evitando la pérdida lenta de Poder Adquisitivo.
Por ello, debemos reflexionar y pensar, si estamos, y en ese caso, si queremos seguir permaneciendo, dentro del grupo que supone el 73% de los Ahorros financieros existentes en España, que no generan rentabilidad, y que están perdiendo Poder adquisitivo cada año, o de los que No.(a excepción del 2020, que la inflación fue del -0,5%, contra la previsión del 0.6% / 1% de este 2021)
Si te encuentres entre la mayoría, por falta de planificación, y priorizando el estatismo de gestión y planificación patrimonial, en vez de ser activo y gestionarlo; o en su defecto, te gustaría poder planificar, pero no tienes ni tiempo ni los conocimientos necesarios, es aconsejable buscar un profesional que te acompañe en su gestión, como también se busca un seguro que te asegure tus activos ante robos, u otras incidencias. No debes perder más tiempo, no pierdas más poder adquisitivo de tus ahorros, y actúa ya!
Es un error que todo aquello que se gana con sacrificio y esfuerzo, y me supone la base para cumplir unos objetivos futuros, se acabe dejando en cuentas y depósitos (entre otros), que mantendrán el saldo estático, y que provocará que su poder adquisitivo salga debilitado, año tras año.
El Ladrón silencioso, al igual que el ladrón común, parece que no está, pero sigue actuando y provocando pérdidas a sus respectivos titulares, aunque no lo veamos, o aunque creamos que a nosotros no nos afectará.
Actúen y planifiquen cuanto antes, o en su defecto, busquen a un profesional quien les pueda asesorar, para que sus ahorros estén a salvo de todo tipo de “ladrón”, ya sea el común o el de la inflación.
Salud y ante este tipo de ladrón, PLANIFICACIÓN!!
